Las estufas de pellets no cuentan con grandes potencias (suelen rondar los 12 – 14 kW) por lo que generalmente se utilizan a nivel doméstico para calentar estancias individuales o como calefacción adicional o de transición, así como para cubrir picos de demanda.
¿Qué son los pellets?
Los pellets de madera son pequeñas piezas prensadas cilíndricas y normalizadas, de madera natural y sin tratar de unos 2 cms de tamaño. Para la fabricación de pellets, las virutas de madera producidas en el aserradero son secadas, limpiadas y prensadas en matrices para formar pellets. Durante este proceso, las virutas se aglutinan de forma natural por su propia lignina.
Ventajas de las estufas de pellets
Utilizan combustible 100% renovable (el pellet) que además, ofrece un precio competitivo y estable contra los combustibles fósiles.
El pellet se caracteriza por su alto poder calorífico, homogeneidad y composición constante, lo que permite conseguir rendimientos energéticos muy elevados.
Además de calentar el aire de forma natural, de la estufa emana un calor radiante muy agradable.
El control se produce de manera electrónica. Gracias al uso de termostatos digitales y programables, este tipo de calefacción puede regularse incluso a distancia desde el teléfono.